Fundación Defendamos la Ciudad manifiesta que en la consulta de pertinencia de ingreso al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) que la Dirección General de Concesiones (DGC) presentó en septiembre de 2020 por las obras de mejoramiento y ampliación de la autopista Vespucio Norte Express, se omitió declarar que con barreras acústicas de 2 m de altura no se logra disminuir a 75 dBA el nivel de ruido en los predios adyacentes a esa autopista.
El análisis de la sociedad concesionaria indica que con el aumento a 4 pistas se requiere instalar barreras acústicas en la autopista junto con vidrios especiales en las ventanas de los departamentos de varios edificios, cientos de casas, un jardín infantil y otras edificaciones. La ineficacia de las barreras acústicas para atenuar suficientemente el ruido y la necesidad de cambiar las ventanas no fue informada por la DGC en la consulta de pertinencia de ingreso al SEIA.
Debemos suponer que la DGC conocía las conclusiones del análisis realizado por la sociedad concesionaria puesto que es parte de los antecedentes técnicos del proyecto vial aprobado por esa dirección.
Como el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) resolvió, irregularmente, no exigir el ingreso obligatorio al SEIA del proyecto en Vespucio Norte Express, la sociedad concesionaria formalmente no tiene obligación de implementar medidas de mitigación en las viviendas y edificaciones adyacentes, como el cambio de las ventanas. Por lo tanto, si el proyecto se construye, los vecinos de Maipú y Pudahuel enfrentarían ruidos peligrosos para su salud sin ser advertidos de esa situación, causándoles un daño a su salud del cual el Estado y los funcionarios involucrados serían responsables.
Frente a esta situación, la muy valiente concejala de Pudahuel, Gisela Vila, procedió a interponer una nueva denuncia en la Contraloría General de la República. Se adjunta copia de esa presentación y de los antecedentes que muestran el incorrecto actuar de la DGC y el SEA en la tramitación de la consulta de pertinencia de ingreso al SEIA del proyecto en Vespucio Norte Express.
Tal como planteamos hace más de un año a propósito de este proyecto vial, el MOP diseña autopistas para barrios ricos y para barrios pobres. Gracias a eso, en el sector oriente de Santiago los vecinos disfrutarán de una autopista subterránea que no emite ruidos molestos mientras en el poniente los vecinos deberán soportar niveles de ruido de más de 80 dBA, perjudiciales para su salud, una discriminación inaceptable en estos tiempos, ver link
En esa columna de opinión hicimos mención a la investigación especial que estaba desarrollando la Contraloría. Esa investigación finalizó identificando una serie situaciones irregulares cometidas por la DGC, incluida la falta de aprobación de la solución para la mediana de la autopista, que no respeta el ancho mínimo de 6 m establecido en el Manual de Carreteras del MOP, ver link
https://www.contraloria.cl/pdfbuscador/auditoria/2f74cda579eb890bd758574621eb4e0d/html
Esperamos que Valentina Durán, nueva titular del SEA, implemente una completa reingeniería en su servicio. Al ministro Juan Carlos García del MOP le solicitamos que haga lo mismo con la DGC, organismo público que por décadas ha actuado en favor de las empresas concesionarias sin mayor preocupación por los ciudadanos que son afectados por las obras en operación.