La municipalidad de Pudahuel y la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), por no exigir a los dueños de la bodega San Francisco el apego a la ley, son los causantes de la tragedia.
(Santiago, martes 03/03/20.- Fundación Defendamos la Ciudad, a través de su presidente Patricio Herman, expresa lo siguiente al respecto. El incendio de ayer en Pudahuel, donde fallecieron 4 personas, ocurrió en el Centro Logístico Puerto Madero, uno de los enormes condominios de bodegas para arriendo a terceros que posee la empresa Bodegas San Francisco en esa comuna. Debemos tener en cuenta que, en general los inversionistas, para aumentar las rentabilidades de sus proyectos, tienden a cometer trampas, como la que se describe enseguida.
En el sector aledaño existe desde 1994 una zona industrial exclusiva, pero el lugar donde ocurrió el incendio hasta noviembre de 2013 era una zona de Interés Silvo Agropecuario Mixto ISAM-2 y desde esa fecha pasó a estar regulada por el artículo 11º Transitorio del Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS) como una zona urbanizable condicionada (ZUC). En ninguno de esos dos casos se permitían o permiten actividades peligrosas. El acceso al lugar se realiza a través de las calles de servicio Pedro Jorquera y San Pedro, que no están diseñadas para soportar los enormes flujos vehiculares que inducen las actividades productivas que se desarrollan en el sector.
En mayo de 2018 una concejal de Pudahuel denunció este proyecto en la SMA, en documento adjunto se aprecia dicha denuncia, y después se vió en la necesidad de informar a la Contraloría General de la República la elusión al Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) EIA que ha realizado la empresa Bodegas San Francisco y otras que desarrollan actividades productivas en Pudahuel.
Este centro de la empresa Bodega San Francisco, por sus características de construcción, en un terreno de 20 hectáreas, tenía la obligación de someterse al SEIA, pero inexplicablemente la Dirección de Obras Municipales (DOM) de Pudahuel nunca le ha exigido a esa empresa el cumplimiento de la ley.
Adicionalmente, dicha empresa posee otros 3 centros logísticos en el mismo sector: La Farfana (80 has), Laguna Sur (35 has) y Vespucio (27 has) y a ellos se agrega el Centro Logístico Lo Aguirre (50 has) en el área rural ISAM-1 de Pudahuel, y ninguno cuenta con las Resoluciones de Calificación Ambiental (RCA).
El funcionamiento de estos centros logísticos genera el colapso vial de toda el área en el entorno del cruce de Américo Vespucio y la Ruta 68. Resulta evidente que no se han realizado los estudios de impacto vial y las correspondientes obras de mitigación acordes a los flujos de vehículos livianos y pesados que entran o salen de las bodegas y otras instalaciones productivas. La DOM de Pudahuel debió exigir esos análisis y obras al momento de entregar las recepciones definitivas de los centros logísticos.
A esta fecha la negligente SMA no ha iniciado procesos sancionatorios ni ha paraliazdo las obras ilegales ni menos ha realizado requerimientos de ingreso al SEIA y por ello la Contraloría tendrá mucho que decir. En resumen, si la SMA hubiera ejercido su rol y si la municipalidad hubiera exigido el cumplimiento de la ley, esta tragedia no se habría producido. Ahora los responsables, tanto públicos como privados, tendrán que asumir las consecuencias por sus incorrectas actuaciones.