En las últimas semanas, el municipio de Valparaíso ha dado una verdadera batalla mediática en contra de las empresas inmobiliarias que buscan llevar a cabo sus proyectos en varios cerros porteños.
Avalada por una serie de reclamos de ilegalidad, interpuestos por un grupo de vecinos de los cerros Barón y O'Higgins, la municipalidad publicó en el Diario Oficial la admisión de dichas demandas, invalidando de manera administrativa el permiso de construcción otorgado por la Dirección de Obras Municipales (DOM) para los proyectos Parque Pümpin y Mirador Barón.
Ahora, una nueva iniciativa en tramitación también deberá enfrentar los reparos municipales. Con fecha 21 de septiembre, la administración de Jorge Sharp entregó una respuesta con varias observaciones a la iniciativa "Patio del Cerro Alegre", que consiste en la construcción de cinco edificios, con un máximo de cuatro pisos de altura, contemplando la venta de 125 departamentos con la misma cantidad de estacionamientos.
El proyecto está previsto para emplazarse en la "Zona Típica Cerros Alegre y Concepción" y fue ingresada ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) como una declaración. Sin embargo, en un informe firmado por el propio alcalde Sharp, la administración consistorial porteña acusa que la iniciativa cuenta con información insuficiente y exige que sea ingresado en la forma de un Estudio de Impacto Ambiental -cuya tramitación es más larga y sus informes más detallados- y no como una declaración.
"Se trata de un proyecto inmobiliario que por decisión del titular, en el marco de la normativa vigente, ingresó al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental a través de una Declaración de Impacto Ambiental (DIA), con el objetivo de conseguir el permiso correspondiente para su construcción", señaló Paulo Gómez, director del Departamento de Comunicaciones del municipio de Valparaíso.
En este sentido, y sobre si el proyecto "Patio Cerro Alegre" cumple con la normativa de carácter ambiental, el municipio porteño planteó que "se observa que la proyección sobre los máximos de emisión de ruidos carecen de la información de ruido base que permita afirmar el cumplimiento indicado".
A su vez, y sobre las rutas de acceso de las maquinarias, especialmente camiones tolva y mixer, la municipalidad señaló que se deberá modificar la ruta planificada, debiendo además entregar un plan de reparación de vías que será sometido a la aprobación técnica por parte del municipio.
"Los equipos municipales analizaron los informes presentados por el titular en el inicio del proceso de tramitación, concluyendo que por sus características, se requieren más antecedentes para establecer un pronunciamiento en torno al proyecto. En este contexto, se ha solicitado que el ingreso al sistema sea mediante un Estudio de Impacto Ambiental, situación que finalmente será determinada por la misma institucionalidad", añadió Paulo Gómez.
Sin embargo, y a pesar que el dictamen del municipio no fue favorable para el proyecto "Patio del Cerro Alegre", desde el organismo municipal valoraron que la presentación se haya realizado a través del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, respetando las conclusiones que pueda entregar dicha entidad en relación a la construcción inmobiliaria.
"Consideramos que es importante destacar que el ingreso al proceso de tramitación ambiental permitirá el pronunciamiento de diferentes servicios públicos en torno a la iniciativa, lo que facilitará que el titular pueda responder a las observaciones y mejorar el proyecto si así fuera necesario, tanto en sus aspectos técnicos como en su relación con el entorno", finalizó el director del Departamento de Comunicaciones de la municipalidad de Valparaíso.
Fuente: http://www.mercuriovalpo.cl/impresa/2017/10/04/full/cuerpo-principal/3/