La construra acusó que había sido un "proceso viciado" y que no se le había consultado su opinión, ante lo cual el comité respondió que el Consejo de Monumentos Históricos sí le consultó mediante un oficio.
Además, acusaron que el gerente general de la inmobiliaria, Luis Felipe Gilabert, "no tiene moral para defender la buena fe de los compradores del Lote 18".
A su vez, cuestiona "es imposible que los empresarios y compradores hayan desconocido la historia de la Villa San Luis y que hayan actuado de buena fe".