Los abajo firmantes manifestamos nuestra satisfacción por la reciente paralización de obras de tres proyectos inmobiliarios de la empresa Inmobiliaria Macul (Juan de Dios Vial Echaurren) en la precordillera de Peñalolén, determinada por el Segundo Tribunal Ambiental de Santiago, y derivada de la denuncia interpuesta por la Comunidad Ecológica de Peñalolén, con el respaldo de otras organizaciones sociales y que acreditó el fraccionamiento de proyectos realizado por la empresa para eludir el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental.
No obstante lo anterior, lamentamos que en dos de los tres proyectos denunciados (cada uno de 4,7 hectáreas), la paralización de obras se concreta después que los árboles, toda la vegetación presente y el suelo han sido totalmente extraídos, provocando o facilitando el grave daño ambiental que la denuncia buscaba precisamente evitar y por el cual evaluamos acciones legales. Esto, habiéndose realizado oportunamente la denuncia ante la SMA, en diciembre de 2014, apenas conocido el otorgamiento de los respectivos permisos de construcción por parte de la Municipalidad de Peñalolén, tras lo cual transcurrieron alrededor de 16 meses hasta que comenzó la tala de árboles y extracción de masa vegetacional nativa, sin que se tomaran medidas provisorias y contando la SMA con todas las evidencias del fraccionamiento de los proyectos denunciados.
Con todo, debemos considerar que gran parte de la precordillera de Santiago ya ha sido depredada a manos de una industria inmobiliaria muy desregulada -particularmente la misma Inmobiliaria Macul, usando las mismas prácticas ilegítimas- y una gestión local obsecuente ante sus impactos socio-ambientales.
Justamente, para enfrentar de manera integral la necesaria protección de la precordillera y evitar la judicialización consecutiva de nuevos proyectos insustentables en esta zona, hemos iniciado un proceso de diálogo e incidencia con el Intendente de Santiago, Claudio Orrego, las Secretarías Regionales de los Ministerios de Vivienda y Urbanismo y Medio Ambiente, y las Direcciones Regionales de ONEMI y CONAF.
Durante una reciente reunión coordinada por la Intendencia hemos propuesto a estos organismos públicos del nivel regional una agenda de trabajo que, partiendo por el congelamiento temporal de proyectos inmobiliarios de cierta envergadura al oriente del canal Las Perdices, establezca una mesa de trabajo público-ciudadano e inicie, con respaldo académico, un proceso para la elaboración y aprobación de un Plan o Programa: SANTIAGO PROTEGE SU PRECORDILLERA, que incluya las necesarias medidas para cautelar de manera integrada las funciones o servicios socio-ambientales que esta zona brinda a toda la cuenca y la ciudad de Santiago:
· Infiltración de aguas lluvias, para prevenir inundaciones y escasez hídrica subterránea en Santiago.
· Ventilación de la cuenca, para reducir la grave contaminación atmosférica que sufre Santiago.
· Recreación y hábitat, generando identidad de la ciudadanía con el patrimonio natural, la geografía y la historia social del territorio.
· Protección de la biodiversidad presente en el bosque esclerófilo, ecosistema principal de la zona central de Chile y representado de manera única en la precordillera.
· Prevención de riesgo sísmico, evitando pérdidas humanas y daños materiales asociados a una eventual actividad de la falla de San Ramón.
Esperamos que la Intendencia de Santiago asuma el liderazgo público para conducir este necesario proceso, que frene la destrucción de la precordillera de Santiago y prevenga los graves impactos que esta genera sobre la población de toda la metrópolis.
Firman:
Movimiento por la Precordillera Santiago Falla (Manuel Rojo, +56-997007843)
Comunidad Ecológica de Peñalolén (Cristián Andrade, +56-977071171)
Colectivo VientoSur (Eduardo Giesen, +56-991630995)
Fundación Defendamos la Ciudad (Patricio Herman, +56-99258 5459)