Defendamos la ciudad

Estimados: Les escribo, porque sé que a ustedes les interesará mucho mi testimonio. Respecto a los que les comentaré ya ingresé un reclamo en la OIRS del Ministerio de Obras públicas a fines del año pasado, del cual aún espero respuesta, pero claramente no con mucha fe de que me proporcionen soluciona mi problema. Les cuento la situación. Yo vivo en Américo Vespucio Sur, altura 3790,cercano a la rotonda Quilín. Nuestro sector se vio afectado en el último tiempo por la construcción de dos grandes obras: Autopista Vespucio Sur y la Línea 4 del Metro. Durante el proceso de construcción de dichas obras tuvimos que soportar las molestias propias de la construcción: ruidos molestos, abundante polvo en suspensión lo que llevaba a tener cerradas las ventanas todo el día, vibraciones constantes por el funcionamiento de las máquinas aplanadoras y del paso de camiones pesados, entre otras incomodidades. Todas estas externalidades negativas fueron soportadas y asumidas como el costo temporal del progreso y de los beneficios que nos traerían a futuro la construcción de estas dos grandes obras. Sin embargo, los problemas persisten. Las vibraciones han vuelto a parecer, en mayor o menor intensidad durante todo el día. Vivimos en un constante temblor. El origen de las vibraciones sin duda se debe al funcionamiento de alguna de las dos obras mencionadas, sin embargo, no podría precisar la causa específica de ellas. Sé que están orientando a los vecinos de Puente Alto que tienen que lidiar con los talleres que se construyeron cerca de sus casas, demasiado cerca para mi opinión. También entiendo todas las molestias que deben soportar y la impotencia que deben sentir al sentirse pasados a llevar tan brutalmente y con el amparo de impunidad que los organismos públicos cubrieron al Metro. Claramente el pronunciamiento de la Contraloría respecto al tema en nada soluciona el problema, ni tampoco senta precedentes para que esto no vuelva a ocurrir. Sin sanciones reales ni compensación real a los vecinos afectados estos problemas seguirán estando presentes en la realidad de nuestro país. Ante lo antes expuesto, no me queda más que decirles que con tristeza estoy pensando que el lugar que encontraba ideal para vivir y convertirlo en mi hogar, hoy ya no lo es tanto y en vez de ser el refugio y relajo que antes me brindaba, hoy se ha convertido en un estresor más en esta vida ajetreada. Me quedo dormida, ya no con el silencio de la noche, si no con el temblor de mi casa producto del paso del metro y de igual forma despierto por las mañanas.¡Qué vida! Acudo a ustedes en busca de ayuda y orientación para que me indiquen donde corresponde que me dirija a buscar una solución a este problema, que es insostenible en el tiempo, así como el de los vecinos de Puente Alto. No sé cuál es el organismo pertinente al cual debo dirigirme, es por eso que les organismos públicos y a partir de la experiencia que tuvieron con los vecinos de Puente Alto. La verdad, no busco polemizar con el tema, solo busco una respuesta y una solución pronta, o por lo menos dejar formalmente expuesto mi reclamo donde corresponda, para que por lo menos sirva de estadística. Espero que todavía las instituciones funcionen, como dicen las autoridades de gobierno, pero también espero que funcionen para el chileno común y corriente, sin influencias ni conocidos políticos. Muchas gracias, Angela Pamela Bahamondes Cuadra RUT: 13.466.386-3