Tras varias semanas de espera, la Contraloría dio su dictamen y fue tajante: Cencosud no logró acreditar que haya iniciado obras del Mall Alto Las Condes 2 (o Norte, como también se lo conoce) en los terrenos frente al actual centro comercial de retailer en la comuna de Vitacura. Con ello, el permiso de edificación queda caducado y el proyecto de la compañía se desmorona.
La idea de levantar un centro comercial destinado a tiendas de lujo junto con torres de oficinas, incluido un rascacielos de 55 pisos, se ve cada vez más lejana para la compañía que lidera el empresario Horst Paulmann.
El permiso de edificación de este proyecto de cerca de US$500 millones fue caducado por la Municipalidad de Vitacura a comienzo de año y ayer fue ratificado por la Contraloría. Tras ello, la compañía queda entre dos caminos: apelar o directamente diseñar un nuevo proyecto acorde a la normativa urbana actual que rige ese sectorial.
La compañía adquirió, en 2010, un paño de 22.500 m2 frente al Alto Las Condes en US$56 millones al empresario Carlos Celle Cafferata, que incluía un permiso de edificación para levantar un mall y varios edificios, incluso el ya mencionado rascacielos de 55 pisos.
Según el permiso de obras N° 121/2000, el proyecto de Av. Kennedy 8950, esquina Padre Hurtado, contemplaba cuatro edificaciones: una de 2 pisos, otra de 19 plantas y dos más altas de 25 y 55 niveles, cuyo destino sería comercio, oficinas, vivienda y servicios públicos. La iniciativa fue acogida, en su momento, como “conjunto armónico, incrementando su altura en un 25%”, y la superficie construida que se proyectaba era de 271.599 metros cuadrados.
Hasta ahí estaba todo bien, pero tal como explicaron en la Dirección de Obras de Vitacura, este permiso fue entregado en el año 2000 y su duración era por tres años. No obstante, acusan que Cencosud realizó movimientos de tierra para poder constantemente extender la duración de este documento. Pero en enero de este año caducó la última extensión del permiso para realizar el megaproyecto y, según conocedores, la empresa no realizó el inicio de obras para mantener la vigencia de la autorización.
Esto último específicamente fue lo que confirmó la Contraloría.
“Como puede apreciarse de lo precedentemente expuesto, y considerando los antecedentes aportados por la empresa Cencosud Shopping Centers, es dable apuntar que todo ello no resulta suficiente para acreditar que se hubieren realizado los trazados del proyecto ni para -de estimarse que efectivamente se llegaron a iniciar las obras-, que estas no estuvieron paralizadas por el plazo a que se refiere”, dice el dictamen.
De este modo, el ente contralor echa por tierra el argumento del retailer y, por lo mismo, se produce una caducidad de manera automática, “limitándose la resolución respectiva a constatar que tales supuestos se verifiquen”. Adicionalmente, le da 15 días contados desde la recepción del oficio al municipio para informar las medidas adoptadas. No obstante, la Contraloría, que lidera actualmente Patricia Arriagada, explicitó que Cencosud se encuentra en su derecho de realizar alegaciones en otras instancias competentes.
Consultada por PULSO, la compañía afirmó que ya fueron notificados del dictamen y que se encuentran evaluando medidas legales para defender el derecho que, según indican, le fue concedido de manera legal y transparente.
Además de la vía legal, ahora el retailer tendría que ingresar un nuevo anteproyecto para que sea evaluado por la comuna y seguir el conducto regular para conseguir el permiso. No obstante, hoy el plan regulador define a dicha zona de Vitacura como Área E-Am5 (Edificación Aislada Media N°5), por lo cual Cencosud sólo podría construir un proyecto de máximo 7 pisos, y cuya altura no puede superar los 24,5 metros.
De este modo, el megaproyecto se vería reducido de manera muy significativa, quedando la opción de desarrollar un proyecto habitacional con una placa de servicios. Algo que haría que la iniciativa no fuera rentable financieramente, dado el precio que la compañía pagó por dicho paño.
A este traspié, se suman otros terrenos que Cencosud mantiene en desuso: tres hectáreas en Martín de Zamora (en Las Condes), el paño de los ex terrenos de la Fisa, las 4 hectáreas que adquirió al colegio Craighouse en Lo Barnechea, y las 11,6 hectáreas que arrienda frente al colegio Saint George (Vitacura).