Con ellas, el municipio pretende hacer de la capital española una ciudad destinada a la ciudadanía y no a los vehículos, con el fin de convertirla en un lugar más amigable con los peatones, disminuir los accidentes de tránsito, la contaminación ambiental y restringir el uso del auto, sobre todo en el centro.
Conoce más detalles del PMUS a continuación.
De acuerdo al plan, elaborado por el Ayuntamiento de Madrid, empresas, políticos de diversos sectores y organizaciones civiles, la ciudad tiene tres mil kilómetros de calles. En ellas, cada día laboral se realizan 2,5 millones de viajes en vehículos privados, en contraste con los tres millones que se desplazan en transporte público, siendo un 40% de éste en buses que no cuentan con una infraestructura adecuada, particularmente los que van a la periferia.
Plan de Movilidad Urbana Sostenible de Madrid. Vía El País.
Por este motivo, el documento apunta a construir 90 kilómetros de vías para buses en este sector de la ciudad, porque el medio más usado hasta ahora para llegar a la periferia se realizan en auto. De hecho, el diagnóstico afirma que, diariamente, siete de cada diez viajes que se realizan en auto en Madrid, tienen como origen o destino este sector.
Plan de Movilidad Urbana Sostenible de Madrid. Vía El País.
Una segunda medida que favorecerá los viajes en buses, es que en los cruces de las calles con menor tráfico tendrán la preferencia. En el caso del Metro, el plan contempla extender la línea 9 hasta Costa Brava, y para el tren, un trazado circular similar a la autopista M-45. No obstante, ésta última iniciativa no está confirmada porque depende del Ministerio de Fomento.
En relación a los desplazamientos a pie, el plan afirma que, entre 2004 y 2012, subieron de 29 por ciento a 31%. Si bien la cifra es positiva, ésta se vio afectada por la falta de recursos económicos para construir más veredas. Por este motivo, el PMUS propone ampliar las veredas mediante la eliminación de pistas en las calles, crear un recorrido peatonal entre el Retiro y la Casa de Campo a través del barrio de Lavapiés y peatonalizar ciertas calles del centro.
Otro factor que el plan busca regular son los estacionamientos para autos, aunque cierto aspecto es cuestionable. Esto porque por un lado se va a duplicar el precio de los estacionamientos privados para que cuesten lo mismo que los públicos (de 2,75 euros por dos horas a 4,85 euros) y disminuya la circulación de autos que buscan dónde estacionar, particularmente en el centro. Asimismo, se limitará cada estacionamiento a un máximo de dos horas, lo que se controlará con el registro de cada patente. Pero, por otro lado, se van a construir 15 mil estacionamientos en los accesos de la ciudad.
Los efectos de esta última medida son cuestionables, porque diversos estudios -como “Políticas Públicas destinadas a reducir el uso del automóvil: Manual de implementación de sistemas de parquímetros para ciudades mexicanas”, del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP) de México- han demostrado que cuando se aumenta la oferta de estacionamientos, no se desincentiva el uso del auto.
Entre las medidas destinadas a fomentar el uso de la bicicleta, está aumentar el número de bicicletas eléctricas disponibles para arrendar, pasando de 1.580 a 3.300. Asimismo, se extenderá la red de ciclovías y las calles de las Zonas 30 que son los lugares en donde deben convivir los autos y las bicicletas. Éstas se decidieron para aumentar los viajes en este medio de transporte limpio que aún no representa un 1% de traslados en auto.
Fuente: Plataforma Urbana 15 de mayo 2014.