La Iglesia de San Francisco data del siglo XVI y es uno de los 16 templos de Chiloé considerados Patrimonio de la Humanidad. En esta línea, Unesco sostuvo que el centro comercial generó un impacto negativo sobre ella afectando su valor universal excepcional. Además, el documento exige a Chile que adopte medidas antes del 1 de febrero de 2015 para mejorar la situación del templo.
Para las organizaciones que por años hicieron frente a la construcción del Paseo Chiloé, esta noticia fue la confirmación del enorme daño que implicó este proyecto. Así lo sostuvo en reiteradas ocasiones Patricio Herman, presidente de la Fundación Defendamos la Ciudad, quien apuntó a las responsabilidades del gobierno en el control de este tipo de iniciativas por parte de privados.
“No es vinculante respecto de las decisiones que toma la municipalidad de Castro. Hay un daño patrimonial en la meseta de Castro, que es el sector más importante, más antiguo, y es la tercera ciudad más antigua que hay en el país. Lamentablemente no se va a poder hacer nada, y en ese sentido acá hay culpas compartidas por parte de todas las autoridades del gobierno central, como del gobierno comunal”, señaló el urbanista.
Y si bien el informe advierte al Estado que se deben “incluir aspectos arquitectónicos que tengan como fin una mejor integración de la forma y los materiales del edificio, con una reducción de su masa y su altura”, a riesgo de que la Iglesia pudiera verse más dañada, Félix Oyarzún del Movimiento Ciudadanos por Castro se mostró escéptico.
“Ya es un hecho consumado y está allí, no lo van a demoler, hicimos todo lo que teníamos que hacer, dijimos todo lo que teníamos que decir. Y estamos en un país que en general a nivel nacional no cuida su patrimonio. De hecho el Presupuesto que tiene el Consejo de Monumentos Nacionales todavía es muy pequeño. En general Chile en comparación con los países de Europa le falta mucho camino por recorrer para tener una conciencia de cómo debemos cuidar nuestro patrimonio, cómo cuidar nuestros lugares históricos y en eso tenemos que avanzar”, explicó Oyarzún.
El dirigente indicó que en estos momentos Chiloé entero es un territorio frágil. “Este lugar es una belleza natural y si alguien quisiera instalar una planta nuclear aquí lo hace, los planes comunales lo permiten”, sostuvo. Eso, no es sólo una preocupación local, la nueva presidenta de la Comisión de Patrimonio del Colegio de Arquitectos, Ana Paz Cárdenas, detalló en este tema.
“Chile en general no cuenta con una ley de protección patrimonial actualizada y que en realidad comprenda cómo es la visión del patrimonio en el territorio hoy. Las edificaciones están desprotegidas bajo ese sistema. Nosotros protegemos inmuebles, pero no protegemos ni la imagen territorial, ni el paisaje cultural, por lo tanto, estamos frente a una desprotección del patrimonio en general”, enfatizó.
La especialista afirmó que la ley de Monumentos viene de 1925 y fue modificada en 1970, fecha desde dónde no hay más cambios, salvo el proyecto ingresado en febrero pasado por Sebastián Piñera, el que, afirmó, tiene una serie de falencias y debe ser retirado del Parlamento. En ese sentido, la especialista indicó que la institucionalidad está en crisis lo que podría cambiar con la creación del nuevo Ministerio de Cultura y Patrimonio, asunto que están siguiendo muy de cerca.
Sobre el centro comercial de Castro, la empresa titular Pasmar, indicó a un matutino que están “estudiando el detalle del informe para poder emitir una opinión”. En tanto, julio del 2015 es una nueva “fecha clave” puesto que se realizará la trigésimo novena Reunión del Comité del Patrimonio Mundial y se podría considerar la inscripción de este monumento en la lista de patrimonio en peligro.