Defendamos la ciudad

La Contraloría General de la República, aprobó de manera definitiva el Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS100), que incorpora 10.207 hectáreas a la superficie urbana.

Para el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, el plan contempla un desarrollo urbano supeditado al cumplimiento de determinadas condiciones. Para ellos se establecen normas urbanísticas aplicables a proyectos que, además de mitigar sus impactos (ambientales y viales), cumplan con condiciones que aseguren el desarrollo de una ciudad sustentable.

Además se definen requerimientos de conectividad a través de la viabilidad estructurante del plan, dotación de áreas verdes y equipamientos por sobre los estándares mínimos, además de la obligación de incorporar un porcentaje de suelo destinado a viviendas sociales.

Cabe destacar que las comunas involucradas comprenden a La Pintana, San Bernardo, Maipú, Pudahuel, Quilicura, Puente Alto, Cerro Navia y Renca.

Para el Subsecretario de Vivienda y Urbanismo, Francisco Irarrázaval, “este un plan necesario porque siempre va a haber que generar oferta de suelo disponible para vivienda, pero controlado y acotado con condiciones que dan garantías de que esto se haga de buena manera.

 “De las 10.207 hectáreas, el 25% será destinado a áreas verdes y un 8% al desarrollo de viviendas sociales. Por lo que ese 33% sólo le permite a las empresas inmobiliarias disponer del 68% restante para desarrollar proyectos”, señaló el presidente de la Cámara Nacional de Servicios Inmobiliarios (ACOP)

Los problemas

Dada esta modificación, según explicó el presidente de la Fundación Defendamos La Ciudad, Patricio Herman, el metro cuadrado que hoy cuesta UF0,5 va a estar costando UF1,5 lo que refleja una ganancia que va a ser exclusivamente privada.

Una visión parecida tiene la directora nacional del Colegio de Arquitectos, Ximena Bórquez, quien plantea que las condiciones impuestas por parte del Minvu a las inmobiliarias son “acciones ínfimas comparadas a lo que se va a recibir como beneficio por generar los proyectos inmobiliarios”.

Para Irarrázaval, si bien van a haber más proyectos dando vuelta- lo que redunda en un beneficio para los ciudadanos que tendrán más alternativas y mejores precios-“esta medida no sólo beneficiará a los que están afuera sino que también a los de adentro”.

Cabe destacar que para Patricio Herman esta aprobación también tendrá efectos en el transporte capitalino ya que “si esto llegará a prosperar vamos a tener problemas, porque aquí no ha habido una coordinación con el Ministerio de Transporte y los cambios están radicados en 8 comunas periféricas”.

Para Bórquez, hay una irracionalidad en la estructura de circulación, en la infraestructura de transporte y en la cantidad de horas de viajes que van a necesitar las personas para trasladarse a sus trabajos. “Hay quienes van a tener que disponer más parte de su vida para desplazarse por la ciudad. Es una ampliación inmobiliaria con fines habitacionales que tiene una densidad que hace que vaya quedando más despoblado”.

Revisado y Replanteado

Desde el punto de vista de las políticas públicas, la directora nacional del Colegio de Arquitectos, señaló además que se van a tener que hacer inversiones irracionales porque cualquier población requiere estar cubierta por servicios de salud y educación  que no se la va a proveer necesariamente el sector privado.

 “La inmobiliaria hace su operación y desaparece. La gente requiere de una cantidad de servicios que no están normalmente previstos en los proyectos y tienen que llegar otras entidades como las municipalidades para ver la forma de cómo se entregaran esos servicios. Estás cargando municipalidades periféricas que ya tienen problemas”, puntualizó.

Otra de las contradicciones que suscitan y son avaladas por Patricio Herman, son las del nuevo plano regulador con la Política Nacional de Desarrollo Urbano (PNDU), firmada g

hace un par de semanas por el Presidente de la República, y que va en una dirección completamente contraria a lo que esta estipula.

La PNDU busca que Chile se acerque a un país desarrollado teniendo buenas ciudades participativas y sustentables donde se respeten los derechos urbanos de los habitantes.

Para Herman, “el Gobierno debiera honrar su política de PNDU y reutilizar los terrenos urbanos que no están debidamente densificados al interior del radio urbano”.

Si bien para el subsecretario ya está todo dicho, hay quienes como Patricio Herman y Ximena Bórquez sostienen que aún no lo está del todo, y mientras el primero ya presentó una queja formal ante la Contraloría señalando que la modificación del PRMS 100 es muy distinta al texto de la primera resolución, la directora nacional del Colegio de Arquitectos, prevé tomar una medida que apunte a que el PRMS requiera ser actualizado, revisado y replanteado.

Fuente: Estrategia 25 noviembre 2013 http://www.estrategia.cl/detalle_noticia.php?cod=88451