La alcaldesa de Providencia, Josefa Errázuriz, visitó la semana pasada las dependencias del Hospital Salvador, junto a su equipo técnico y funcionarios del ministerio de Salud, donde se visó el anteproyecto del complejo Geriátrico-Salvador, que contempla una ampliación de este recinto, además de una extensión del Instituto Nacional de Geriatría.
Con este plan, la capacidad de pabellones crece en un 73% y el número de camas aumenta un 44%, considerando además la renovación de dos recintos que exhiben deterioro y daños provocados por dos terremotos a construcciones que superan los 120 años de antigüedad.
Esta discusión se prolonga de la administración anterior, ya que el Plan Regulador impide la realización de obras en este sector. Por otro lado, el municipio mantiene una defensa del área verde al interior del hospital, además de una capilla declarada Monumento Nacional.
Al respecto, la alcaldesa Josefa Errázuriz subrayó el interés porque este centro asistencial se mantenga en la comuna, y declaró la intención por contemplar tanto la visión del municipio como del ministerio de Salud.
“Nosotros demostramos en todo momento la disposición al diálogo, y contribuir al mejoramiento del proyecto. Yo hubiera hecho un Seccional para modificar el Plan Regulador y hacer un proyecto distinto. Hablamos de dos hospitales, en ambos casos, referentes nacionales del sistema de salud”, dijo.
Esta es una nueva arista para el Plan Regulador que la alcaldesa busca presentar en los próximos años, que se centra en la protección de áreas verdes y la identidad de los barrios, con interés por el impacto vial que significa la modernización de los dos hospitales.
Desde los trabajadores, la atención existe a una demanda esbozada desde distintas organizaciones. La presidenta (s) de Fenats Salvador, Ismaela Cáceres, manifestó el temor por una privatización encubierta de los recintos y el despido de trabajadores a honorarios.
La dirigente indicó que “queremos un hospital nuevo con platas públicas. Tenemos una enorme cantidad de gente a honorarios, que con un nuevo hospital no quedará trabajando. Los titulares son los mínimos en comparación a honorarios, esto se va a concesionar, ya tenemos empresas privadas, entonces vemos una pérdida de la fuente laboral”.
Al igual que el municipio, los funcionarios tienen especial atención por el futuro del patio contiguo a calle Hernán Alessandri, que cuenta con especies nativas y árboles milenarios, sin que el proyecto contemplara condiciones especiales para su protección.
En esta línea, el presidente de “Defendamos la Ciudad”, Patricio Herman, citó un dictamen de Contraloría que protege el uso de suelo en estos terrenos, lo cual debe ser atendido desde el Gobierno a la hora de esbozar un proyecto de construcción.
“Hay un conflicto entre un buen deseo del Minsal y la decisión de la municipalidad en términos de hacer cumplir las normas en el uso de suelo de este terreno. Todo esto fue respaldado por un dictamen de Contraloría, entonces no sé cómo lo hará el ministerio para sobrepasar ese dictamen”, tendría que recurrir a los tribunales de Justicia.
El proyecto contempla mil 843 estacionamientos subterráneos a concesión, en una edificación de cinco pisos. Si bien la alcaldesa propuso un Plan Seccional, esto fue desechado por el Seremi de Vivienda. Pese a ello, el Ejecutivo mantiene la idea original, que inicia obras en 2015 y proyecta inaugurarse en 2018.