Defendamos la ciudad

El domingo 3 de julio a las 12:00 en el acceso al cerro San Cristóbal por Pedro de Valdivia Norte, se realizará una Marcha Ciudadana con el fin de evidenciar en terreno el real impacto que tendrá el desarrollo del proyecto túneles El Salto- Pedro de Valdivia, tanto en las áreas verdes del Parque Metropolitano como en su entorno cercano. El vocero de los vecinos de Pedro de Valdivia Norte, Juan Luis Moure, explicó los detalles y fundamentos de la movilización ciudadana. “En esta marcha queremos recorrer con la prensa, visitantes del Cerro San Cristóbal, ambientalistas y personas con conciencia ecológica el trazado actual licitado por el MOP para evidenciar cómo estos túneles afectarán realmente al Cerro San Cristóbal y a su entorno cercano. La idea es dimensionar en terreno la destrucción que sufrirá el Parque y analizar detalles como el desastre vehicular que se avecina, la contaminación ambiental y acústica que invadirá a uno de los escasos lugares donde los santiaguinos pueden hacer deportes y disfrutar de la naturaleza”, destacó. Los residentes de dicho barrio mantienen un recurso de protección ante la Corte Suprema y su principal crítica es que este proyecto no fue ingresado al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental por el Mop, como debía. “Aquí estamos hablando de 6 mil seres humanos, NO DE 300 CISNES, que se sienten directamente afectados en su hábitat y medioambiente y de 5 millones de habitantes que ven nuevamente mermadas sus áreas verdes, y la más importante de Santiago. Este proyecto impulsado por el MOP es un ejemplo real del doble discurso ambiental de este gobierno, y de los ejecutores y financistas del proyecto que son exclusivamente empresas y bancos europeos, como BBVA, ABN AMRO y la sociedad concesionaria conformada por empresas alemanas y españolas (Hotchief y Dragados), lo que contradice claramente las opiniones de los diputados del Parlamento Europeo, que no reclaman por el grave daño medioambiental que causan aquí sus propias empresas”, destaca Moure. Antecedentes del proyecto El barrio Pedro de Valdivia Norte lleva un año dando una dura batalla para modificar el actual trazado de los dos túneles del Cerro San Cristóbal, que atravesarán por la mitad del Parque Metropolitano, pulmón verde, área protegida y atractivo turístico de Santiago. Daño especialmente grave si consideramos que nuestra capital sólo cuenta con un tercio de las áreas verdes recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Este es un proyecto impulsado por el Gobierno de Chile, a través del MOP, cuyo trazado estimado para 35.000 vehículos diarios utiliza a lo menos 5 hectáreas superficiales y planas del parque, además de afectar un área mayor (otras 25 hectáreas aproximadamente). Son dos túneles de dos pistas cada uno, igual que los dos túneles de Lo Prado. Pese a lo anterior, el MOP no sometió el proyecto al Sistema de Estudio de Impacto Ambiental, éste tampoco tiene aprobación de la Corema, ni existió participación ni diálogo ciudadano. Además, infringe la ley especial que creó el parque, y el Plan Regulador Metropolitano que señala literalmente, en su art. 5.2.2., que la vialidad urbana es un uso expresamente prohibido en el Parque Metropolitano. El proyecto alternativo presentado por los vecinos, plantea modificar el trazado actual salvando así 22 hectáreas de las 30 que se cercenarían del Parque Metropolitano, y que serían destruidas por el actual proyecto de túneles que atravesarían el Cerro San Cristóbal. Además, se evitaría la destrucción del Barrio Pedro de Valdivia Norte, al desplazarse la salida y conexión del túnel poniente, hacia el sector de Lo Saldes, donde no existen viviendas ni áreas verdes. Otra alternativa es mantener el trazado actual del proyecto, pero que salga y continúe siempre en forma subterránea desde la salida del cerro hasta la Costanera Sur, bajo el Mapocho. Acciones realizadas por los Vecinos de Pedro de Valdivia Norte Legales: se mantiene actualmente un recurso de protección de la Junta de Vecinos, en apelación ante la Tercera sala de la Corte Suprema. Confiamos que los Sres. Ministros Galvez, Yurac, Juica, Fernández, Oyarzún y Srta. Morales analizarán en profundidad los antecedentes, evitando que se repitan los errores del recurso relativo a Celco y la Planta Valdivia. El número de ingreso de la apelación a la Corte Suprema es el 2.385/2005. Reuniones con todas las autoridades e instituciones pertinentes: antes de llegar a esta instancia se realizaron gestiones a todo nivel. Se hicieron reuniones que incluyen al alcalde y concejales de Providencia; los diputados del distrito; la Comisión de Obras Públicas de la Cámara de Diputados; El ex Ministro de Obras Públicas, Javier Etcheberry; el Ministro Secretario General de la Presidencia Eduardo Dockendorff y el Coordinador de Concesiones, Camilo Rojas con su equipo técnico responsable del proyecto. “La última gestión fue hablar con el jefe de gabinete del Ministro Estévez a mediados de Febrero, el abogado Reinaldo Núñez, quien nos dijo que contestarían nuestra carta en 15 días: pasados tres meses aún estamos esperando una respuesta”, señala Luis Zamorano, presidente de la Junta de Vecinos. Reunión con la empresa Concesionaria del Proyecto: Durante el mes de Junio representantes de la Junta de Vecinos se reunieron con la Concesionaria San Cristóbal Express empresa formada por europeos que se adjudicó la construcción y operación de este proyecto. La empresa manifestó su voluntad de estudiar una alternativa que implicara una mejora en el impacto del proyecto. “Ellos están esperando una solicitud formal del Mop para proceder al estudio de alternativas” destacó Zamorano. Creación de una coordinadora: Se formalizó la creación de una coordinadora que reúne a más de 20 organizaciones de las comunas de Ñuñoa, Providencia, La Reina y Las Condes. La coordinadora aglutina a Juntas Vecinales y organizaciones ciudadanas como Ciudad Viva, Defendamos la Ciudad, Defensa de Áreas Verdes de Providencia, entre otras, que están alarmadas por la forma autoritaria e inconsulta en que el Ministerio de Obras Públicas realiza las licitaciones y adjudicaciones de proyectos que tienen un impacto tremendo en el medio ambiente y en la calidad de vida de los ciudadanos. La constitución de esta coordinadora tiene un antecedente directo que fue la formación de la “Coordinadora No a la Costanera Norte”, que aglutinó organizaciones de Santiago y juntas vecinales de 12 comunas en el año 1997. Esta coordinadora fue fundamental para movilizar y organizar a la gente y así evitar la ejecución del entonces proyecto original de la Costanera Norte, que destruía barrios completos y arrasaba con áreas verdes y parte importante del Cerro San Cristóbal.