Defendamos la ciudad

A raíz de la reciente visita (martes 7 y miércoles 8 de Marzo de 2006) del Director del Servicio de Impuestos Internos (SII) y sus asesores a las Comisiones de Vivienda y de Hacienda del Senado, para explicarles a sus miembros la metodología utilizada para establecer los nuevos reavalúos de los inmuebles afectos a pago de contribuciones de bienes raíces, quedó absolutamente claro que ese servicio del Estado operó en los términos señalados en la Ley Rentas II. Juan Toro, Director del SII, amplió el plazo para que los contribuyentes puedan formular sus reclamos y expresó que, para tal propósito, esos propietarios podían justificar sus demandas, suministrándoles a ese servicio copia de contratos de compraventa, tasaciones comerciales de bancos, avisos en los diarios, etc. para demostrar que el porcentaje del alza del avalúo en sus casos excede el precio de mercado de su inmueble. Dado que algunos políticos están pidiendo que el proceso de actualización de cifras llevado a cabo por el SII quede sin efecto, Patricio Herman de la Agrupación Defendamos la Ciudad expresó "es indudable que esos parlamentarios no están defendiendo a la clase media, como ellos lo han pregonado, sino a aquellos particulares, sociedades de inversión e inmobiliarias, que tienen gran cantidad de inmuebles que les producen réditos. En efecto, esas personas naturales y jurídicas, están afectas a rentas presuntas por sus ingresos en el momento de declarar anualmente sus impuestos y hasta ahora han estado acostumbrados a determinar esas rentas presuntas en base a avalúos fiscales muy reducidos en comparación con los avalúos comerciales de sus inmuebles y por ello -a través de terceros- han puesto el grito en el cielo para continuar siendo subsidiados con ese menor valor. Lo que ha hecho el SII es lo correcto, porque lleva las cifras de 4.500.000 de inmuebles a valores reales, en un proceso transparente que adoleció de algunos errores, como es natural en toda obra humana. Si en el transcurso de los próximos meses el SII va a ajustar las cifras de un número determinado de viviendas para llevarlas a precios de mercado, es obvio que esos políticos vociferantes están cuidándoles los bolsillos a aquellos rentistas que siempre han pagado menos impuestos con el ardid de la renta presunta que generan sus inmuebles minusvaluados. Dejemos que las instituciones funcionen, porque cada contribuyente finalmente va a pagar su impuesto territorial por el precio de mercado de su vivienda, criterio sano, justo y profundamente equilibrado. Así operan las reglas parejas para todos". (FIN) "Defendamos la Ciudad" (2330321-09/2585459)