Defendamos la ciudad

Vecinos de Peñalolén y la Fundación Defendamos la Ciudad denunciaron la ilegalidad de la resolución ambiental otorgada al Templo Baha í que se construye en una zona de preservación ecológica de la comuna.

Dirigentes dela Asociación de Propietarios Arboretum de Peñalolén y de la Fundación Defendamos la Ciudad se reunieron con funcionarios de la Seremi de Medio Ambiente para hacerles notar la equivocación cometida por los miembros de la ex Corema, quienes en diciembre de 2007, calificaron favorablemente un Estudio de Impacto Ambiental con antecedentes desvirtuados por la Contraloría General de la República.

En ese momento se consideró que el acceso a dicho templo cumplía con las normas viales que la reglamentación urbana exige para este tipo de equipamientos de culto.

Según señalan estas organizaciones, este proyecto solo se podía emplazar enfrentando calles de servicio o de superior categoría, lo que a esta fecha se incumple, ya que el templo en ejecución enfrenta sólo una vía local que tiene una calzada de7 metrosde ancho, lo cual es, a su juicio, insuficientes para su carga de ocupación que, por lo demás, contempla 184 estacionamientos.

Ana María de Las Heras, representante dela Asociaciónde Propietarios Arboretum que congrega a 120 viviendas unifamiliares colindantes al proyecto aludido, manifestó que “le hicimos notar por escrito al Seremi de Medio Ambiente que adopte las decisiones correspondientes para que la resolución ambiental contenga la información veraz de los hechos y en tal sentido lo prudente es que este caso sea trasladado al Consejo de Defensa del Estado ya que es impresentable que continúe esta construcción valiéndose de actos administrativos mendaces”.

Patricio Herman señaló que “no sólo estamos ante una gruesa equivocación de la institucionalidad ambiental, como ha quedado en evidencia, sino que el Estudio de Impacto Sobre el Sistema de Transporte Urbano (EISTU) adolece de nulidad absoluta porque el Seremi de Transportes de entonces aseguró en la sesión de la ex Corema que la vía de acceso al templo tenía 80 metros de ancho (sic), lo que es una falacia, tal como fue resuelto por la Contraloría en sus dictámenes 15469 de 2009 y 253 de 2010”.

“Es inaudito que los funcionarios públicos, con tal de favorecer ciertas actividades de la construcción, se presten para este tipo de vergonzosas maniobras. Por otro lado el Templo, que tiene una considerable altura, se emplaza en plena falla geológica activa de San Ramón, la misma que ha estado en discusión, porque todavía no se conocen los resultados de su estudio, elaborado porla Universidadde Chile. En todo caso, ese estudio será conocido por la opinión pública el próximo 10 de julio, según ha informado el ministerio de Vivienda y Urbanismo”, precisó.