Los residentes del pasaje Patriotas Uruguayos, en el Barrio Yungay, viven justo atrás del Liceo de Aplicación. Claudia Sagredo, representante de los vecinos en el conflicto, cuenta que siempre han tenido una buena relación con los estudiantes: “se les caía la pelota en nuestras casas, venían a buscarla y se las devolvíamos”. Sin embargo, todo cambió cuando en octubre de 2011, salieron a sus patios y vieron junto a ellos estructuras de fierro de 10 metros de altura.
Los antecedentes de este hecho se originan cuando en 2010, el Consejo de Monumentos Nacionales aprobó el proyecto presentado por la Municipalidad de Santiago para Ampliar y Rehabilitar el emblemático Liceo de Aplicación, tras el daño que causó el terremoto del 27 de febrero y que, entre otras cosas, provocó la destrucción de un túnel subterráneo que unía los dos bloques en que se divide el edificio. Cabe destacar que este último es una obra neoclásica y actual patrimonio que data del siglo XIX.
Karina Aliaga, arquitecta de la Secretaría Ejecutiva del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), cuenta que “después del mandato del Municipio, el CMN evaluó el impacto que la obra provocaría ‘dentro’ del Liceo”. Sin embargo, Karina reconoce que no se tomó en cuenta a las casas colindantes, aunque éstas también son parte de la Zona Típica que el CMN debe proteger.
Muro de 10 metros de altura entre el Liceo de Aplicación y las casas del pasaje Patriotas Uruguayos, Barrio Yungay.
La denuncia
Según el comunicado que la organización Vecinos por la Defensa del Barrio Yungay envió a la prensa, “el proyecto original de remodelación del liceo fue cambiado porque el Alcalde hizo ajustes presupuestarios que implicaron un nuevo diseño que abarata los costos, transformando un proyecto de gimnasio de alta calidad y bajo impacto, en una cancha techada con un muro lateral de más de 10 metros”. Al respecto, Karina Aliaga, del CMN, afirma que se trata de un “gimnasio abierto”. Le pregunto entonces si es lo mismo que una cancha techada, y responde: “es un poco más que eso, porque creo que tiene graderías bajo el techo”.
De todas maneras, el CMN tiene en consideración las demandas de los vecinos, por lo que designó a los arquitectos Leonardo Cabrera y Cecilia Vera para evaluar el impacto del muro en sus casas. Según los vecinos, el CMN les prometió un informe sobre los hechos.
Por otra parte, Jorge Atria -arquitecto y asesor patrimonial del proyecto- reconoce que el gimnasio pudo haberse planificado de otra manera: “Al principio estaba pensado para estar en un nivel sub-suelo, pero luego eso se cambió, porque la idea es que sea abierto o transparente, para que desde ahí se tenga una visión del espacio patrimonial del Liceo”. Respecto a este cambio, Rodrigo Sepúlveda -vecino- afirma que los cambios en el proyecto se hicieron a principios de 2011, y que ellos sólo se enteraron a fines de diciembre.
Otro de los reclamos de los vecinos tienen que ver con en el protocolo con que ha procedido la empresa constructora COMSA Chile, especializada en construcciones ferroviarias. Claudia Sagredo -vecina-recalca: “Nos llama la atención que estén tan apurados en construir el muro, siendo que lo principal era la rehabilitación de las salas de clases y esas ni las pescan”.
Pero más allá de las molestias causadas a ellos, protestan también por el patrimonio dentro del Liceo, pues fueron testigos de la demolición de “la casa del Rector”, un edificio que daba cuenta de la antigua tradición de que el Rector viviera dentro del establecimiento, y que según los argumentos que la Municipalidad dio a Rodrigo Sepúlveda, “fue derrumbada porque no era de fachada continua, entonces se podía botar”. Con impotencia Rodrigo comenta: “te creo que esto lo haga una empresa privada, pero no que quienes te pasa a llevar sean el Alcalde y el Municipio, que se supone que nos representan”.
Jorge Atria explica que los edificios 21 y 29 de la Calle Romero son los que se están conservando: “Estos edificios fueron grandes núcleos formativos de la juventud de principios del siglo pasado. Son emblemáticos porque representan un momento histórico que da cuenta de la manera en que se concebía la habitabilidad del edificio.”
En la foto, al final del pasaje, se observa cómo se impone el muro sobre la fachada de las casas.
Las medidas de Zalaquett
Claudia Sagredo, Rodrigo Sepúlveda y José Osorio -representantes de los vecinos- se preparan para entrar a la reunión entre los concejales Pedro García, Ismael Calderón, Loreto Schnake, Claudia Pascual, el Alcalde Pablo Zalaquett y el Consejo de Monumentos Nacionales. Según los vecinos, en el encuentro los concejales dijeron no comprender el sentido que tiene el muro del 10 metros de altura, mientras que el Alcalde y el Director de Obra, respondieron: “está todo en lo legal”.
Rodrigo Sepúlveda, cuenta que “luego de los reclamos por el muro, el Alcalde nos propuso formar un equipo para acuerdos, pero partiendo de la base de que nunca quedaba nada por escrito y de que el muro iba sí o sí. Tiempo más tarde, le ofrecieron a la señora más anciana del pasaje, pintarle la muralla del patio. Ella aceptó, porque nunca imaginó cómo se vería un muro de 10 metros de alto. Ahora se arrepiente”.
Un hecho que últimamente afectó al Liceo de Aplicación, fue el incendio que se generó en el segundo piso de la construcción, a las 15:00 hrs. el 23 de diciembre de 2011. Aún se desconocen las causas.
13 Enero 2012
El polémico muro de 10 metros que se construye en el Barrio Yungay
10 metros de alto mide la indignación de los vecinos del Barrio Yungay (declarado Zona Típica y de Conservación Histórica en 20091), producto de un muro que se está construyendo en el Liceo de Aplicación, y que está contiguo a sus casas patrimoniales. En el Consejo de Monumentos Nacionales y en la Municipalidad de Santiago argumentan que se ha cumplido con todos los requerimientos legales. Plataformaurbana.cl 13 de enero 2012.
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