Defendamos la ciudad

Hoy en día, es posible afirmar que la contaminación que no tiene una presencia física y un registro visual concreto es la que causa mayor daño, pues el afectado carece de señales que le permitan tomar precauciones. Es así que 5 profesores investigadores del campus universitario de Jussieu (París), han muerto de cáncer a la pleura causado por la exposición pasiva y permanente del amianto, mineral contenido en los elementos de asbesto cemento de los edificios. Este dato se viene a sumar al hecho de que 2 vecinos del sector, que residen en una vivienda directamente expuesta a la radiación electromagnética de esta torre, han sido intervenidos quirúrgicamente del cerebro en los últimos años.

En ambos casos, las enfermedades han estado asociadas a la exposición pasiva y permanente de los afectados a materiales y artefactos altamente contaminantes. Por tal razón, queremos denunciar la actitud pasiva de las autoridades municipales, ministeriales y parlamentarias que ha hecho oídos sordos de esta situación desde el año 2007. A raíz de ello, los vecinos involucrados queremos insistir en la denuncia mediante la enumeración de los serios peligros que provoca esta torre de comunicaciones:

1. Torre con sobrepeso
Desde el año 2005 hasta hoy, esta torre metálica registra un peligroso aumento de sobrepeso que supera el límite de carga aconsejado por la resistencia de sus materiales y su diseño inicial. Este sobrepeso de la carga de diseño puede ser causante de su derrumbe por un sismo de mediana intensidad o una ráfaga de viento de unos 50 Km/hr., con el consiguiente peligro para la vida de los vecinos del sector y con efectos perjudiciales para el patrimonio construido. Es así, que la empresa propietaria de la instalación ha multiplicado por cuatro el número permitido de antenas, obviando el peligro que ello acarrea y superando los índices de radiación permitidas (435 microwatts / cm2). Asimismo, la carencia de tensores aumenta los peligros comentados. Actualmente, el peligro es mayor toda vez que han aumentado las cablerías pertenecientes a una segunda empresa de telecomunicaciones que hace uso de la estructura, aumentando la carga de una torre ya resentida por los efectos del sismo de febrero 2010.

2. Torre con elementos radioactivos
Las antenas de esta torre poseen elementos radioactivos, que se utilizan para mejorar su rendimiento y cobertura. Este hecho no solo afecta la salud de los vecinos del sector, sino también la de los trabajadores de las empresas que laboran en dichas instalaciones. La presencia de estos elementos radioactivos tiene efectos desconocidos para la salud de las personas. De existir los mismos, estos tienen una mayor incidencia en la salud de la población infantil, formada por niños residentes y las 800 alumnas de un colegio de religiosas situado a 120 metros de distancia, por constituir sus pequeños cuerpos organismos en formación, altamente sensibles a los efectos medioambientales.

3. Torre reduce valor de las propiedades
La presencia de una torre con antenas radioactivas tiene una incidencia negativa en la tasación comercial de las propiedades del sector, con una repercusión situada entre el 10 al 20% de minusvalía del precio final. Esta apreciación ha sido entregada por profesionales tasadores.

4. Torre con ruidos molestos y alarmas acústicas en horas nocturnas
Los ventiladores y demás equipos eléctricos de la torre, provocan ruidos molestos y persistentes en las horas nocturnas, impidiendo el necesario y conveniente descanso de los vecinos. Situación que se ha visto agravada por el sonido intenso y continuo de una alarma que asola en horas intempestivas cada noche.

5. Terreno con presencia de roedores
La falta de limpieza tanto al interior del sitio como en su franja pública, permite la presencia de ratas, que se propagan con facilidad a las viviendas vecinas con resultados indeseados para la salud pública.

Esta torre de antenas contaminantes pertenece a la empresa mexicana Telmex dueña entre otras, de la marca de teléfonos móviles Claro, propiedad de uno de los hombres más ricos del planeta –Carlos Slim- quien ha conseguido reunir una abultada fortuna descuidando los efectos nocivos de sus operaciones financieras. En su abundante publicidad, paradójicamente, Telmex se declara protectora de la seguridad y del medioambiente. Frente a todos estos datos altamente preocupantes, es necesario recurrir a la Superintendencia de Servicios Eléctricos y Comunicaciones, que ha otorgado el permiso de instalación de esta torre en este sector residencial, con el fin de corregir esta grave situación que aflige tanto a propietarios como a residentes eventuales.