Suelo habitacional de Pudahuel se agota en 2 años; Maipú en 5 La Pintana y Quilicura también registran una situación crítica en disponibilidad de terrenos, según estudio de Atisba y Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios. En unos ocho años, el Gran Santiago podría quedarse sin suelo disponible para proyectos residenciales. Pero la situación es más inquietante para algunas comunas como Maipú, Pudahuel, Quilicura y La Pintana, donde los terrenos para uso habitacional se pueden agotar entre dos y cinco años. Esas son algunas de las conclusiones que sacó la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI) tras conocer el estudio que encargó a la consultora Atisba -ligada a Iván Poduje-, que mediante fotografías aéreas digitales midió el suelo habitacional disponible en la Región Metropolitana (RM) y, a la vez, determinó el ritmo de consumo anual de los 52 municipios de la zona. El análisis reveló que en el Gran Santiago -y sus 37 comunas- quedan 6.432 hectáreas (ha) para desarrollo de viviendas, mientras que en toda la RM la cifra sube a 23.833 hectáreas. Colina (4.438 ha), Lampa (3.691 ha) y Tiltil (2.655 ha) son las comunas que lideran en cantidad de terreno utilizable. El director ejecutivo de la ADI, Vicente Domínguez, destacó que Ñuñoa, Conchalí, Estación Central, Independencia y Santiago ya no poseen superficie para desarrollos habitacionales a no ser que "se demuelan casas para construir edificios". Domínguez afirmó que el suelo del Gran Santiago se podría agotar en cerca de ocho años, pues si el país logra un crecimiento económico importante, el mercado consumiría unas 800 hectáreas anuales. Indicó que durantes los periodos de crisis se demandan cerca de 300 a 400 hectáreas al año. Según datos de la Seremi de Vivienda en la capital se consumen cerca de 700 ha al año. La directora de Estudios de Atisba, Lucile Richard, señaló que la "situación más crítica", debido a su estrechez de territorio habitacional y por el rápido crecimiento que han experimentado en los últimos años, se produce en cuatro comunas. Explicó que a Pudahuel le quedarían dos años para agotar sus 57 ha disponibles, mientras que el stock de terrenos en Maipú (339 ha) alcanzaría sólo para 5 años. A Quilicura (193 ha) y La Pintana (17 ha) le restarían 3 y 2 años, respectivamente. Cambio a PRMS aseguraría crecimiento por 20 años Para los desarrolladores inmobiliarios y Atisba, la aprobación a los cambios al Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS), que añadiría cerca de 10 mil hectáreas urbanas a la región, es la gran solución al déficit de terrenos para nuevas viviendas. "Con el ingreso de ese suelo se cubriría el desarrollo de los próximos 20 años", afirmó Vicente Domínguez. Lucile Richard sostuvo que el visto bueno a ese plan -cuya discusión será repuesta este mes en el Consejo Regional Metropolitano- "alargará la vida útil" de Maipú, Pudahuel o La Pintana, evitando "las migraciones forzadas" a comunas más alejadas de Santiago. Recordó que el 22% del suelo disponible está en el barrio alto, "lo que supone un problema serio para las viviendas de menos de 2.500 UF". Domínguez agregó que "la modificación del plan regulador es la única manera de no expulsar a los pobres a Melipilla o Talagante, donde se les hace más cara la vida, están lejos de centros de trabajo y no hay suficiente infraestructura en salud". Este año se venderán unas 30 mil viviendas -casas y departamentos- y en 2011 la cifra crecería 7%.