Defendamos la ciudad

Representantes del Movimiento en Defensa del Medio Ambiente de la Comuna de La Higuera (MODEMA) y de la organización ambiental OCEANA, asistieron a la Comisión Investigadora de Resoluciones COREMA -que preside el diputado Alfonso De Urresti (PS)- con el fin de entregarles los antecedentes que -a su juicio- harían inviable la instalación de dos termoeléctricas que se encuentran en proceso de Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) por parte de la Comisión Regional del Medio Ambiente de Coquimbo. Se trata de los proyectos “Central Termoeléctrica Barracones" -de la empresa Suez Energy- y "Cruz Grande" -de la Compañía Minera del Pacífico (CMP)-, que se ubicarían al norte de La Serena y que para sus operaciones utilizarán carbón, combustible altamente contaminante -según las organizaciones ambientalistas- para una zona protegida como lo son la Reserva Marina Islas Choros-Damas y la Reserva Nacional de Pingüino de Humboldt, ubicadas a unos 25 kilómetros del lugar de emplazamiento de las termoeléctricas. Sostienen las comunidades y organizaciones de La Higuera, que por la cercanía del proyecto “Barrancones” a pueblos y localidades de pescadores, sus emisiones podrían afectarlos, especialmente cuando las condiciones meteorológicas aumenten los límites permitidos, lo que provocaría un grave daño ambiental y local. En este sentido, consideran “que ni el EIA ni los adendas presentados valoran suficientemente todos los perjuicios ambientales y sociales y que no se compensarían con los supuestos beneficios económicos, para unos pocos, que genera esta central”. De acuerdo a Rosa Rojas, presidenta de MODEMA, “no se ha estudiado suficientemente la incidencia que podrían tener las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) y óxidos de azufre (SO2) y serían necesarios estudios más profundos y detallados que mostraran claramente cuál sería el efecto de estas emisiones los días en que los vientos desplacen los gases contaminantes hasta Los Choros, Chungungo o La Higuera”. Agregó la dirigenta que “nosotros nos oponemos porque en este lugar, existen dos reservas, una Reserva Nacional de los Pingüinos de Humboldt y una reserva marina, que se han creado porque existe un ecosistema único, denominado hot spot mundialmente, el cual debe ser protegido”. Postura que respaldó el director de OCEANA, Maximiliano Bello. “Existe información suficiente respecto de que el impacto no es solamente en la zona local directamente del proyecto, sino que la zona de influencia es mucho mayor, donde existe justamente -a 25 kilómetros aproximadamente- una de las primeras reservas marinas, con uno de los lugares con mayor biodiversidad, y más importancia de conservación en Chile”. Puntualizó el representante de OCEANA que “por lo tanto, afectaría directamente ese sector que es un polo muy importante de atractivo turístico y por lo mismo también un polo de desarrollo para las actividades locales”. Por su parte, el presidente de la Comisión Investigadora, diputado Alfonso De Urresti (PS) indicó que “es muy preocupante lo que está ocurriendo, la magnitud de la cantidad de centrales que se quieren instalar en la bahía, lo que afecta o lo que puede afectar a la población de pingüinos y a la población de chungungos, a la población de ballenas que pasan por este sector, a la rica fauna marina, es algo que nosotros no podemos quedar indiferentes”. Sostuvo el parlamentario que “por lo mismo, hemos enviado una serie de oficios para recabar información de cómo está funcionando la CONAMA en esa región y poder entregar la protección necesaria, toda vez que nos ha sorprendido que existieran incluso amenazas telefónicas, amenazas a la integridad física de muchos de los integrantes de este comité (MODEMA), eso no puede ocurrir en nuestro país”, puntualizó. Concesiones marítimas de Central Termoeléctrica Barrancones Con fecha 21 de octubre de 2009 la Subsecretaria de Marina denegó las dos solicitudes de concesiones marítimas presentadas por la empresa Suez Energy para su proyecto Central Termoeléctrica Barrancones, ubicado en el borde costero de la comuna de la Higuera, en la IV región. Estos permisos de uso de borde costero, son requisitos esenciales que la empresa debe cumplir -antes de que se le entregue el permiso ambiental- ya que las centrales termoeléctricas de este tipo necesitan extraer y devolver agua de mar para su funcionamiento y deben contar con puertos de descarga para el carbón. La autoridad marítima indica en su resolución que no cuenta con los antecedentes suficientes que den una seguridad legal y administrativa para resolver favorablemente la solicitud. Actualmente la empresa -que ingresó al Sistema de Evaluación Ambiental en diciembre de 2007- solicitó una suspensión hasta abril de 2010 para responder las observaciones de los servicios públicos, sin embargo sin las concesiones se hacen inviable sus operaciones. Barrancones considera la instalación de tres unidades de generación a carbón por 180 MW cada una, e incluye una turbina de respaldo de otros 25 MW. Además, considera toda la infraestructura asociada a este tipo de centrales, como son los depósitos de cenizas, un puerto de descargas y otros. Para concretar estas obras, Suez Energy estimó una inversión total de US$ 1.100 millones.