Defendamos la ciudad

SANTIAGO, octubre 16.- Cerca de 400 propietarios de Villa El Dorado, Benito Juárez y Los Castaños se dieron cita en un masivo Cabildo Ciudadano para expresar su más decidido rechazo al autoritario intento de la Municipalidad de Vitacura de modificar las normas de edificación del Plan Regulador Comunal (PRC) bajo el pretexto de que esas zonas urbanas consolidadas están "deterioradas" y que por ello se hace necesario una "renovación urbana que permita el progreso". Los organizadores cursaron invitaciones formales al alcalde de la comuna, Raúl Torrealba, y concejales, así como a todos los candidatos del distrito 23 y circunscripción Santiago Oriente al Congreso Nacional, con el propósito de que expresaran sus particulares puntos de vista respecto de la modificación al PRC que promueven sigilosamente los sectores inmobiliarios. Sólo estuvieron presentes en el Cabildo el concejal Sergio Hernández (DC), los candidatos a diputados Leopoldo Sánchez (PPD) y Clemente Pérez (DC) y el candidato a senador Manuel Riesco (Juntos Podemos Más). La periodista Paloma Martínez, presidenta de la Asociación de Propietarios de Villa El Dorado, condujo la asamblea acompañada de Patricio Herman y Jorge Cisternas, directores de la Agrupación "Defendamos la Ciudad". Ambas organizaciones convocaron al cabildo y dieron a conocer en detalle a los vecinos el impacto negativo que tendrá en sus estilos de vida el cambio a las "reglas del juego" que impulsa el municipio. En esta instancia dieron su opinión decenas de vecinos e hicieron prevalecer sus derechos urbanos consagrados en la actual normativa y los intereses de la comunidad al criticar duramente un artículo publicado por el diario El Mercurio, en el que se estigmatiza a Villa El Dorado y a los Castaños como una zona de pobreza y de delincuencia, pero no como víctimas, sino como autores de los ilícitos. Los molestos vecinos señalaron que este hecho buscaba depreciar el valor comercial de sus hogares y que formaba parte de una campaña orquestada por el sector de la construcción. Paloma Martínez señaló que "en la década del ochenta se erradicaron las poblaciones callampas porque al decir de algunos los rotos no podían vivir en tierras de alta plusvalía. Hoy los voraces empresarios inmobiliarios pretenden soterradamente erradicar a la clase media de Vitacura, con la ayuda del municipio. Lo importante es que los vecinos están tomando conciencia sobre el tipo de autoridades locales que tienen, las cuales muestran un discurso público mentiroso para ´cazar votos´, pero en privado impulsan acciones que van directamente en contra de los vecinos de Vitacura". Por su parte, Patricio Herman, de la Agrupación "Defendamos la Ciudad" dijo que "está claro que las autoridades locales privilegian los negocios porque éstos generan ingresos y los residentes de los barrios consolidados optan por preservar sus estilos de vida a escala humana. El camino para resolver la pugna es llamar a un plebiscito en los sectores afectados, tal como está establecido en los artículos 99º y 100º de la Ley Orgánica Constitucional de Municipalidades. En Chile debe operar la democracia y ésta es la manera civilizada para resolver las contrapuestas apreciaciones que se tienen con respecto a las normas del Plan Regulador Comunal de Vitacura". En tanto Jorge Cisternas manifestó que "la burbuja inmobiliaria está obligando a erradicar a los vecinos que viven en viviendas unifamiliares, con verborreas falaces por parte de los interesados y esto tiene que terminar. La ciudadanía tiene la obligación de decir basta y, en este sentido, nuestra Agrupación "Defendamos la Ciudad" siempre apoyará a estos vecinos". El candidato a diputado (PPD) Leopoldo Sánchez calificó "como inaceptable y grosera la crónica del diario El Mercurio, en que de manera sibilina el autor denostó a los habitantes de Villa El Dorado y Los Castaños, donde con evidente hipocresía y disimulo se da a entender que los ´pobres´ de Vitacura no pueden seguir viviendo en esa comuna. Lo que hay detrás de esto es el negocio inmobiliario hecho a espaldas de la ciudadanía, donde los grandes especuladores pasan por sobre la dignidad de la gente".