Defendamos la ciudad

Muchas ciudades de nuestro país muestran una grave situación de contaminación atmosférica, asunto que no ha podido ser controlado por quienes detentan el poder político.

El Intendente de Santiago, Claudio Orrego, nos ha dicho que nuestra grave contaminación es producto de los asados por los festejos de la Copa América, resaltándose entonces que indirectamente nuestros hábiles futbolistas tiene una cierta cuota de responsabilidad en esa lacra.

 Qué forma más irresponsable la de Orrego para enfrentar un problema tan serio como lo es nuestra contaminación y le retrucamos que los sabrosos asados a la parrilla que compartimos en familia y con los amigos no tienen que ver con este gravísimo problema que genera miles de muertes al año.

 ¿ Sabrá el señor Orrego que en Chile hay 107 centrales térmicas funcionando y contaminando montañas de Co2, diariamente para producir electricidad ?

¿ Sabrá el Señor Orrego, que el Metro de Santiago, la lavadora de su casa, la plancha para planchar su impecable camisa, su PC y todo lo que es eléctrico en Chile, primero necesita quemar enormes cantidades de petróleo para que funcionen ?

 ¿Qué dice el Señor Orrego, al haberse abortado el proyecto HidroAysén y haberlo festejado con un carnaval en el centro de Santiago, perdiéndose la oportunidad de reemplazar 30 centrales térmicas por una forma limpia, renovable, inagotable y ecológica para producir electricidad para el consumo nacional?

 Cuál es la recomendación del Señor Orrego, si Chile entra en recesión y no tenemos recursos para importar petróleo para producir electricidad?  Y si  la producción más adelante crece, entonces, aún más centrales térmicas?

 Cuál es la solución en lo inmediato, para parar las filas de niños, ancianos y población en general, con respiración obstruida y pulmones sucios que hacen filas en los hospitales, consultorios y clínicas, víctimas de la maligna contaminación?

 Me gustaría conocer la opinión del mediático intendente metropolitano y agradezco a la fundación Defendamos la Ciudad que publique mis dichos.

 Fuente: