30 Septiembre 2014

El Parque Laguna Carén legalmente no existe

Columna de opinión de Patricio Herman de Defendamos la Ciudad publicada en portal El Dinamo el 30 de septiembre 2014.

Toda la prensa ha informado que el proyecto de estadio de fútbol para 35.000 espectadores de Azul Azul en el Parque Laguna Carén, comuna de Pudahuel, terreno tipificado como  área verde de 1.011 hectáreas en el Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS), que el gobierno de Patricio Aylwin le donó en marzo de 1994 a la Universidad de Chile, no se podría construir por la restricción contemplada en ese instrumento normativo. En efecto, en ese PRMS se establece que en dicho parque solo se puede ocupar en las edificaciones permitidas el 1% de la superficie del terreno, las que son 10 hectáreas, muy insuficientes para el propósito de edificar el anhelado estadio de la “U”.

Recientemente hemos revisado la legislación vigente y estamos en condiciones de darle una buena noticia a los directivos de ese club deportivo, ya que para ese parque, por imperio de la modificación del artículo 59º de la Ley General de Urbanismo y Construcciones (LGUC), caducó la declaratoria de utilidad pública de área verde en la misma fecha (13 de febrero de 2004) del cambio legal.

Por estar localizado en una zona rural de la comuna de Pudahuel, ese parque perdió hace 10 años su calidad de área verde, tal como está expresado en ORD. Nº 4249 del 27/10/08 enviado por Carlos Estévez, Seremi de Vivienda y Urbanismo, a Ricardo Gallardo, Director de Obras Municipales de Pudahuel, en donde le expresa que ese amplio terreno se regula por las normas generales, asunto ratificado en dictamen Nº 34250 del 24/06/10 de la Contraloría General de la República. 

En tal sentido, Azul Azul puede iniciar los trámites de los permisos para la construcción de su estadio en ese terreno acogiéndose al artículo 55º de la LGUC, cuyo último párrafo dice “Igualmente, las construcciones industriales, de equipamiento, turismo y poblaciones, fuera de los límites urbanos, requerirán, previamente a la aprobación correspondiente de la Dirección de Obras Municipales, del informe favorable de la Secretaría Regional del Ministerio de la Vivienda y Urbanismo y del Servicio Agrícola que correspondan”.

Se debe tener en cuenta que en el artículo 2.1.33 de la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones (OGUC) se definen las clases de equipamientos, entre los cuales está el deporte, uno de cuyos destinos es la construcción de estadios para clubes deportivos.

En resumen, por no existir la restricción que tenía el Parque Laguna Carén, el estadio de Azul Azul se puede construir en una fracción determinada de superficie, sin límite, del terreno de 1.011 hectáreas de la Universidad de Chile. Perfectamente la casa de estudios superiores le puede traspasar al club deportivo la superficie que sea necesaria para el emplazamiento del estadio : bien podrían ser unas 30 o más hectáreas, asunto que conocen muy bien, tanto el alcalde Johnny Carrasco de Pudahuel, como todos los profesionales que se desempeñan en la Dirección de Obras de ese municipio.

En tal sentido los directivos de la “U”, a partir de hoy, están en condiciones de iniciar los trámites en la Municipalidad de Pudahuel y en los otros servicios públicos para edificar su estadio, para lo cual su titular deberá solicitarle a sus competentes consultores privados que preparen las documentaciones de rigor para que próximamente cuente con el respectivo Estudio de Impacto Sobre el Sistema de Transporte Urbano (EISTU) y con la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) favorable, exigencias sine qua non para que el Director de Obras Municipales de Pudahuel curse el permiso de edificación y autorice el inicio de faenas, respectivamente.

Si todo se hace bien y Azul Azul asume las obras de mitigación y compensaciones que arrojarán ambos análisis técnicos, a fines del año 2016 se podría inaugurar ese flamante estadio con la presencia de las máximas autoridades políticas y deportivas del país.

Fuente: El Dínamo http://www.eldinamo.cl/blog/el-parque-laguna-caren-legalmente-no-existe/ 



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