En junio de 2007 se aprobó el Plan Regulador Comunal de Castro vigente y el seremi de Vivienda de aquella época le hizo saber al municipio que en la zona ZC1 se debía establecer una altura máxima de construcción, lo que fue desatendido por el alcalde y concejales. En La Nación.cl ya nos hemos referido a este luctuoso episodio cuyas obras están paralizadas por decisión propia de la empresa Pasmar, titular del proyecto. Recordemos que con anterioridad, la Dirección de Obras de la Municipalidad de Castro, le había cursado multas y había intentado detener las faenas sin resultados : la empresa desobedecía las instrucciones de la autoridad local y por ello el caso está radicado en el Juzgado de Policía Local, sin que la jueza emita sentencia. Pues bien, el lunes 26 de marzo recién pasado nos reunimos en Puerto Montt, Región de Los Lagos, con Fernando Gunckel, seremi de Vivienda y Urbanismo y con Alex Bartsch, seremi de Transportes y Telecomunicaciones, las 2 autoridades del gobierno central que deberán resolver el problema derivado de este voluminoso mall localizado en el casco histórico, zona ZC1 del Plan Regulador Comunal (PRC), de la ciudad de Castro. El coeficiente de constructibilidad en esa zona es igual a 5, lo que significa que en el terreno de Pasmar, que tiene 4.147 m2, se pueden edificar sobre el nivel natural del suelo 20.735 m2 : ello producto de la multiplicación de 5 por 4.147. Todas las construcciones bajo el suelo no se consideran para ese coeficiente y por ello el permiso de edificación habla de una superficie mayor, la que se aprecia más adelante. Es conveniente que la opinión pública sepa que en junio de 2007 se aprobó el PRC de Castro vigente y dentro de las observaciones planteadas por el seremi de Vivienda de aquella época, se le hizo saber al municipio que en la zona ZC1 se debía establecer una altura máxima de construcción, lo que fue desatendido por el alcalde y por los concejales. Hoy día en esa zona central existe altura libre y su máxima se fija por el punto de encuentro de las rasantes de 60º que se calculan desde los deslindes con los predios colindantes y desde el eje de la calle que enfrenta el proyecto. Según el arquitecto Gunckel, la actual superficie construida llega a los 25.343 m2 que es un 5% mayor a los 24.137 m2 autorizados en el permiso de edificación del 8 de abril de 2008, lo que sería legal en opinión de esta autoridad sectorial, criterio que no compartimos porque para sobrepasarse la construcción en ese porcentaje el titular del mall, la empresa Pasmar, debió haber obtenido una autorización formal por parte de la directora de Obras, lo que no ha acontecido. Dicho seremi de Vivienda sostiene que, el mayor porcentaje construido, se regulariza automáticamente en la recepción final de obras. En síntesis, no hay inconveniente en que la actual altura del mall haya llegado a los 7 pisos, aunque el permiso autoriza 4, porque el PRC no fija cantidad de pisos máximos como tampoco altura máxima en metros, lo que consideramos una aberración, pero así lo decidieron las autoridades municipales en el año 2007. Según el ingeniero Bartsch no existe un Estudio de Impacto Sobre el Sistema de Transporte Urbano (EISTU), ante lo cual le manifestamos que, al no existir un EISTU aprobado por él, no se podía haber otorgado un permiso de edificación y es más, también le dijimos que por la carga de ocupación del mall éste debía enfrentar una vía colectora u otra de superior categoría, lo que tampoco sucede. El proyecto enfrenta la calle Serrano de 15 m. definida como local, es decir, insuficiente para soportar los futuros flujos vehiculares. Ambos seremis manifestaron que se superaba este inconveniente con la compra, por parte de Pasmar, de una casa contigua al predio en donde se emplaza el mall, vivienda que enfrenta la calle San Martín, vía de 20 m., es decir, de superior categoría según la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones (OGUC). Pero con esta solución que significa ampliación del predio, hay un problema ético porque el dueño de esa casa es el alcalde de Castro don Nelson Águila de militancia DC. En síntesis, no hay inconveniente en que la actual altura del mall haya llegado a los 7 pisos, aunque el permiso autoriza 4, porque el PRC no fija cantidad de pisos máximos como tampoco altura máxima en metros, lo que consideramos una aberración, pero así lo decidieron las autoridades municipales en el año 2007. El seremi de Vivienda tiene competencias para demoler lo construido que supera la superficie indicada en el permiso, lo que no sucederá porque él ya dijo que ese exceso correspondía sólo al 5%. Si Pasmar logra que el seremi de Transportes autorice el EISTU, lo que es muy difícil, el adefesio que se observa en la fotografía que ha estado circulando por el mundo será una realidad en un tiempo más. Por el irregular desarrollo de los hechos, partiendo por la puesta en marcha del PRC en el año 2007, por las no exigencias del EISTU aprobado, para cursar el permiso de edificación, por no acatar Pasmar oportunamente las instrucciones municipales, todo lo cual es impropio, consideramos inoficioso que se haya convocado a una consulta ciudadana no vinculante. En razón a que este caso lo consideramos demasiado vergonzoso, oportunamente entregamos los antecedentes en la Contraloría General de la República, para que, en conjunto con la Unidad Especializada Anticorrupción del Ministerio Público y con el Consejo de Defensa del Estado, investiguen todo lo acontecido con este megaproyecto emplazándose en una zona sensible que consideramos patrimonial : por ello celebramos la decisión de la UNESCO, institución de la Naciones Unidas que ya le pidió un completo informe al Consejo de Monumentos Nacionales sobre este desaguisado urbano.
29 Marzo 2012
Mall de Castro en la actualidad
Columna de opinión de Patricio Herman de Fundación Defendamos la Ciudad publicada en La Nación el 27 de marzo 2012.
Publicado en
Patricio Herman
Inicia sesión para enviar comentarios