Defendamos la ciudad

Columna de opinión de Patricio Herman de la Agrupación Defendamos la Ciudad, publicada en la revista El Periodista el 06 de octubre de 2006. En la edición del 15 de Septiembre pasado se publicó en La Segunda un largo reportaje titulado “Vía Crucis burocrático retrasa proyecto de universidad deportiva de Zamorano”, en el cual los promotores de ese proyecto educacional critican a quienes deben autorizar el funcionamiento de una universidad privada en el Parque Padre Hurtado (ex Parque Intercomunal de La Reina). El mandamás de la iniciativa decía que “llevamos 2 años trabajando y la universidad aún no puede salir. La regulación es tremenda. Yo creo que no quieren que haya nuevas universidades privadas”. (sic) El vespertino aseguraba que la Universidad del Deporte, así se llamará, le había entregado al Consejo Superior de Educación 5.500 páginas con todos los detalles de cada uno de los cursos que tendrá cada carrera, tramitación que los socios del proyecto objetan porque, según éstos, lo que debiera interesar al regulador es el nivel de responsabilidad y calidad de quienes están detrás de la iniciativa : y ellos son lo óptimo. La Junta Directiva está conformada por académicos universitarios, banqueros, hombres de negocios y el afamado Iván Zamorano, quien tiene la concesión por 25 años del terreno área verde en donde se desea instalar esa casa de estudios superiores. El error que cometieron esos empresarios de la educación fue haber iniciado los trámites académicos antes de tener la seguridad de que podían ejecutar las obras de construcción de ese tipo de equipamiento en un área verde intercomunal, la cual tiene limitaciones establecidas por la regulación urbana vigente. Dentro de los usos de suelo permitidos no figuran los de educación universitaria y ello lo debía saber, al menos, uno de los socios porque él era hasta hace poco tiempo vicerrector de la Universidad Finis Terrae, la cual hace 3 años no pudo edificar su casa matriz de un área verde del mismo tipo localizada en La Dehesa. Estamos hablando del Cerro del Medio, área verde intercomunal, predio que le fue aportado a esa universidad por los Legionarios de Cristo, organización religiosa que, a pesar de sus convincentes acciones de lobby ante el débil poder político no pudo hacer lo mismo con el órgano de control de la legalidad. Hubo un completo dictamen de la Contraloría que invalidó todos los permisos de edificación contrarios a derecho otorgados por el Minvu, Corema y Municipalidad de Lo Barnechea, el cual fue ratificado por la propia Corte Suprema de Justicia y debemos suponer que ese ex vicerrector de la universidad afectada debió haberlo leído. Por otro lado, en la concesión que tiene Bam Bam para su Ciudad Deportiva en la parte oriente de ese Parque, se explicitó con claridad que no existía la posibilidad de instalar en esa área verde una universidad, nos imaginamos porque los que redactaron el contrato de concesión conocían las reglas del juego señaladas en el artículo 5.2.3. del Plan Regulador Metropolitano de Santiago, instrumento normativo urbano de rango superior. Ya que el Consejo Superior de Educación aprobó recientemente el proyecto institucional y de carreras de dicha universidad en formación y dado que ésta todavía no cuenta con la edificación en donde impartirá la educación proyectada, esperamos que los capaces miembros de la Junta Directiva harán las inversiones necesarias para disponer del terreno apto para emplazar tal universidad. Ello será fácil, porque uno de sus directores es presidente de un conocido banco comercial de la plaza. Estamos seguros que ese banco, sin mayores trámites, les otorgará el capital necesario para adquirir el predio y comprar los materiales de construcción.