Los científicos descubrieron que ambos actúan al unísono para activar genes que provocan una inflamación potencialmente peligrosa de los vasos sanguíneos Esperan que su trabajo conduzca a un examen de sangre sencillo que permita a los médicos evaluar el impacto de la polución del aire en la salud de las personas. El estudio de la universidad UCLA en Estados Unidos fue publicado en la revista "Genome Biology". El investigador principal, el doctor André Nel, experto en nanomedicina, dijo que el impacto de la combinación de partículas de diesel con grasas de colesterol era mayor que su impacto individual. "Su combinación crea una sinergia peligrosa que provoca un caos cardiovascular mucho mayor que el causado por el diesel o el colesterol por separado", afirmó. Los investigadores se enfocaron en la interacción entre partículas de combustión de diesel y ácidos grasos que se encuentran en el colesterol asociado a las lipoproteínas de baja densidad (LDL), y que se conoce como el "colesterol malo" que provoca el bloqueo arterial. Ambas son fuentes de las moléculas llamadas radicales libres que dañan las células y los tejidos y que podrían propiciar una inflamación, generando una enfermedad arterial. Cultivos de células (La combinación de partículas de combustión de diesel y ácidos grasos) crea una sinergia peligrosa que provoca un caos cardiovascular mucho mayor que el causado por el diesel o el colesterol por separado Doctor André Nel, investigador principal Los investigadores combinaron las partículas contaminantes y grasas y crearon cultivos con células extraídas de las paredes interiores de los vasos sanguíneos. Horas después, extrajeron el ADN de las células para analizarlo genéticamente. Los resultados mostraron que se activaron los genes que alimentan la inflamación celular. Después expusieron a ratones con colesterol alto a las partículas de diesel y vieron que algunos de estos mismos genes fueron activados en los tejidos animales. Según el doctor Nel, "entendemos muy poco la manera exacta en que las partículas contaminantes provocan daños cardiovasculares". "Pero sí sabemos que estas partículas están recubiertas de sustancias químicas que dañan los tejidos y provocan inflamación de la nariz y los pulmones", dijo. "La inflamación vascular, por su parte, genera depósitos de colesterol y arterias bloqueadas que podrían crear coágulos sanguíneos que, a su vez, podrían provocar un ataque al corazón o un fallo cardíaco", añadió. Cathy Ross, enfermera cardiaca del British Heart Foundation (la Fundación Británica del Corazón), dijo que ya se sabía que una exposición alargada a la polución del aire aumenta un poco el riesgo de morir víctima de una enfermedad cardiovascular o un infarto. "Sabemos que para la mayoría de la gente, medidas diarias como tener una dieta baja en grasas saturadas, hacer una actividad física regular y no fumar tendrán un mayor impacto para reducir el riesgo de desarrollar una enfermedad cardiaca", afirmó "Pero cualquiera con una enfermedad pulmonar crónica o una enfermedad cardiaca crónica debería evitar estar fuera mucho tiempo cuando los índices de polución son elevados", añadió.