Fundación Defendamos la Ciudad
Teléfono 09-2585459
Localización: Chile
Sitio web: www.defendamoslaciudad.cl
Directorio:
Presidente: Patricio Herman
Presidenta honoraria: Sara Navas
Director: Jonás Figueroa
Director: Miguel Prieto
Orígenes:
Nació a fines de 1997 en torno a los ideales y la persona de Enrique Siefer Eiler (1921-2003), arquitecto, urbanista y profesor de la Universidad Católica de Chile, quien era entonces presidente del Centro Chileno de Urbanismo. Debido al crecimiento explosivo de Santiago, con evidente aumento de la conflictividad citadina, el profesor Siefer promovió redes vecinales para hacer valer los derechos de los habitantes frente al sintomático hermetismo de las autoridades centrales y locales, buscando defender con sentido realista una ciudad en función del hombre y disfrutar un medioambiente libre de contaminación.
“La ciudad actual –escribió Siefer- está sometida por el fenómeno universal de la emigración campo-ciudad (el concepto urbanización se refiere a este fenómeno). La ciudad es de todos; lo que suceda en ella, bueno o malo, nos afecta a todos, y por lo tanto todos tenemos derechos sobre ella y deberes dentro de ella; la ciudad es un bien común. El país también lo es y la democracia moderna se desarrolla en el territorio total siempre que la gente participe en todos los temas públicos, no sólo en los político-sociales, sino que también en los del desarrollo y ordenamiento del territorio nacional y de las ciudades” ( Urbanización y Contaminación , Madrid, 2004).
Criticando el gigantismo de las metrópolis latinoamericanas, Siefer agregaba con alarma: “Santiago es el ejemplo más lamentable del mundo en cuanto a centralismo: más del 33% de la población chilena vive en la capital y más del 40% en la Región Metropolitana, en apenas 2% del territorio nacional” (obra citada).
La Fundación Defendamos la Ciudad surgió pues como espontánea respuesta desde la ciudadanía inorgánica, en legítimo afán por dar consistencia a las demandas del vecindario frente a los cotidianos atropellos del rediseño urbano y la indiferencia de las autoridades.
Objetivos:
La Fundación se define como totalmente ajena a cualquier motivación de lucro, y, por el contrario, opera con un espíritu de generosa y constructiva cruzada, procurando colaborar principalmente a:
1º Tornar más armónica y saludable la vida en las ciudades;
2º Bajar el nivel de conflictividad en la convivencia interciudadana y con la autoridad pública;
3º Buscar el sinceramiento de los problemas urbanos de cara a la verdad y el encuentro de soluciones justas y realistas;
4º Transparentar las decisiones de inversión pública y privada que afectan a la ciudad;
5º Conservar y rescatar áreas verdes;
6º Defender el patrimonio histórico de identidad urbana;
7º Rechazar cualquier amenaza contra el medioambiente;
8º Crear conciencia en la ciudadanía de sus derechos y deberes urbanos;
9º Trazar una agenda descentralizadora de Chile tras emparejar las opciones al desarrollo político, económico, social y cultural de todas las regiones del país.
Sujetos a quienes la Agrupación convoca
La integran abogados, arquitectos, urbanistas, ingenieros, economistas, historiadores, comunicadores sociales, comerciantes, ejecutivos, empresarios, trabajadores, dueñas de casa, estudiantes y ciudadanos con vocación solidaria hacia el bien común.
Aunque ocupada en sus inicios en los problemas de la Región Metropolitana , la Agrupación está buscando consolidar posiciones en todo el país, considerando la similitud de muchos casos de atropello a vecinos y al medioambiente que se dan también en regiones.
Herramientas para cumplir objetivos:
Sin perjuicio de buscar siempre nuevos medios para robustecer su accionar, la Fundación cuenta principalmente para el cumplimiento de sus objetivos con la voluntad generosa de sus afiliados, los apoyos específicos de otras organizaciones ciudadanas, centros académicos, algunas autoridades fiscalizadoras y medios de comunicación (incluyendo su propio sitio web www.defendamoslaciudad.cl ), en la franca convicción de que siempre es posible movilizar conciencias cuando se buscan fines legítimos de interés colectivo.
Son frecuentes las presentaciones de la Fundación ante los Tribunales de Justicia, la Contraloría General de la República , el Consejo de Defensa del Estado, la Presidencia de la República , los Ministerios, el Parlamento, los Municipios y todo organismo competente en las áreas de su preocupación.
Multiplicación de la conflictividad:
Desde sus comienzos en 1997 la Fundación ha intervenido en busca de soluciones armónicas y paz social en la mayoría de los temas urbanos más polémicos, con diversos resultados. La multiplicación de los focos de problemas, sin embargo, no cesa de aumentar, mostrando que su origen apunta a esquemas de organización política y económica que merecen ser abordados desde perspectivas más elevadas, con participación de todos los actores que priman en la ciudad y el territorio nacional.
Es indudable que ante la avalancha de la modernidad se requiere construir una firme ética del quehacer urbano , una cultura de la ciudad, inspirada en principios solidarios y fundada en el más acendrado respeto a la vocación social de la naturaleza humana. Etica que esté reflejada en un estricto ordenamiento legal e institucional, acorazando a los usuarios de la ciudad contra toda intentona que busque dañar sus derechos a vivir en ella.