Defendamos la ciudad

Fundación Defendamos la Ciudad informa que a través de una auditoría la Contraloría General de la República detectó severas fallas en la fiscalización del cumplimiento de las exigencias contractuales a las que está obligada la sociedad concesionaria del aeropuerto Arturo Merino Benítez, Nuevo Pudahuel. Aquí una pequeña muestra:

"Ninguno de los informes de auditoría emitidos en el período comprendido entre 1 de octubre de 2015 a la data de esta auditoría, había cumplido satisfactoriamente con revisar, y acreditar los ingresos de las personas naturales o jurídicas relacionadas con la sociedad concesionaria.

En este punto conviene hacer presente, la importancia que reviste para el interés del Estado el adecuado control de los ingresos comerciales de la concesión, teniendo presente el mecanismo de compartición de ingresos entre el Estado y la sociedad concesionaria considerado en este contrato de concesión".

Sin comentarios queridos lectores. Si bien la Contraloría instruye la realización de sumarios administrativos en la Dirección General de Concesiones del MOP, cuando estos los realizan las propias instituciones que cometen las faltas, el resultado es predecible: no hay responsabilidad de funcionarios o autoridades, menos a 3 meses de terminar el gobierno de excelencia.

Hacemos un llamado a los diputados para que ejerzan su función fiscalizadora, habida cuenta de que la sociedad concesionaria Nuevo Pudahuel tiene un pleito con el Estado a propósito del costo de las obras de ampliación del aeropuerto.

El informe de la Contraloría está disponible en este enlace:

https://www.contraloria.cl/pdfbuscador/auditoria/19452b3fd108dbca1a500dec18c7dfdc/html